Los peores lugares del mundo para los trabajadores y trabajadoras
La Confederación Sindical Internacional (CSI), confederación de centrales sindicales nacionales, cada una de las cuales agrupa a los sindicatos de un país en particular, desde años atrás, ha dedicado parte importante de sus esfuerzos a elaborar estudios relacionados con los derechos humanos de los trabajadores alrededor del mundo, entre los que destaca el Índice Global de los Derechos de los Trabajadores.
Este Índice Global de los Derechos de la CSI muestra cuáles son los peores países del mundo para trabajar por medio de la clasificación de 141 países en una escala del 1 al 5 basada en el grado de respeto de los derechos de los trabajadores.
Clasificación
1 Violaciones irregulares de los derechos
Los derechos laborales colectivos están por lo general garantizados. Los trabajadores pueden sindicalizarse libremente y defender sus derechos de manera colectiva con el Gobierno y/o las empresas y pueden introducir mejoras en sus condiciones laborales por medio de la negociación colectiva. Las violaciones de los derechos de los trabajadores/as no son inexistentes pero no se producen de manera regular.
2 Violaciones repetidas de los derechos
Los derechos laborales colectivos en los países clasificados en el grupo 2 son ligeramente más débiles que en los países del grupo 1. Ciertos derechos han sido objeto de repetidos ataques por parte de los Gobiernos y/o las empresas y han socavado la lucha para conseguir unas condiciones laborales mejores.
3 Violaciones regulares de los derechos
El Gobierno y/o las empresas interfieren con regularidad en los derechos laborales colectivos, o no garantizan plenamente aspectos importantes de estos derechos. Existen deficiencias en la legislación y/o determinadas prácticas que posibilitan las violaciones frecuentes.
4 Violaciones sistemáticas de los derechos
Los trabajadores de los países del grupo 4 han denunciado violaciones sistemáticas. El Gobierno y/o las empresas están firmemente decididos a acallar la voz colectiva de los trabajadores poniendo en peligro los derechos fundamentales.
5 Derechos no garantizados
Los países clasificados en el grupo 5 son los peores países del mundo para trabajar. Si bien la legislación puede enumerar ciertos derechos, lo trabajadores carecen efectivamente de acceso a ellos y están por tanto expuestos a unos regímenes autocráticos y a unas prácticas laborales injustas.
5+ Derechos no garantizados debido a la desintegración del Estado de derecho
Los derechos de los trabajadores en los países clasificados en el grupo 5+ están igual de limitados que en los países del grupo 5. No obstante, en los países del grupo 5+ la situación está vinculada a unas instituciones disfuncionales como resultado de un conflicto interno y/o una ocupación militar. En tales casos, el país se clasifica por defecto en el grupo 5+.
La CSI, representante de la voz global de los trabajadores y trabajadoras, ha estado documentando y exponiendo durante tres décadas las violaciones de los derechos de los trabajadores a través de la información de contenido publicada en su Informe. El Índice Global de los Derechos de la CSI se desarrolló para aumentar la visibilidad y la transparencia de la trayectoria de cada país en materia de derechos de los trabajadores. Además, el Índice Global de los Derechos de la CSI es un instrumento que permite realizar un seguimiento de las tendencias en todo el mundo cada vez que se producen cambios en las políticas o en la legislación.
El Índice Global de los Derechos de la CSI 2016 muestra que los derechos de los trabajadores se han debilitado en prácticamente todas las regiones del mundo, en ocasiones con serias campañas de represión contra el derecho a las libertades de expresión y de reunión.
La región de Oriente Medio y Norte de África fue una vez más la peor región para los trabajadores y trabajadoras. La total falta de libertad sindical y el sistema de la kafala, que somete a millones de trabajadores/as migrantes al riesgo del trabajo forzoso, continúan generalizados en todos los Estados del Golfo.
Los países de Europa y Asia Central continúan ofreciendo la mejor protección de los derechos sindicales a los trabajadores, pero al mismo tiempo han experimentado el mayor deterioro de dichos derechos, una tendencia que continúa.
Incluso en países con sólidas tradiciones democráticas, los Gobiernos han introducido propuestas para intentar establecer barreras legales que recortan las voces de los trabajadores en la negociación de convenios colectivos y respecto a las políticas gubernamentales. Los sindicatos en el Reino Unido, Francia y Finlandia luchan contra cambios legislativos regresivos.
Los diez peores países para la población este año son Qatar, los Emiratos Árabes Unidos, Turquía, China, India, Camboya, Belarús, Irán, Guatemala y Colombia. Otros países han descendido en su clasificación este año, incluyendo Indonesia (del 4 al 5), Paraguay (del 3 al 4) y Bélgica (del 1 al 2).
Pese a que hay un país menos donde los trabajadores perdieron la vida por sus actividades sindicales, el número de países donde los trabajadores/as se exponen a la violencia se incrementó de 36 en 2015 a 52 en 2016.
Los países donde los trabajadores y trabajadoras se han enfrentado a las peores formas de violencia, incluyendo asesinatos, amenazas, secuestros y violencia física, incluyen Egipto, Colombia, Guatemala, Honduras, Indonesia y Ucrania. Reclamar mejores condiciones de trabajo convierte a los trabajadores en el blanco tanto de las fuerzas de seguridad del Estado como de matones contratados por las empresas.
Otra tendencia es el dramático aumento de la injerencia y las restricciones a las libertades de expresión y de reunión pacífica. Las amenazas de acciones terroristas son utilizadas por los Gobiernos para impulsar programas de seguridad que socavan el derecho a las libertades de reunión y de expresión que no sólo son los pilares de las sociedades democráticas, sino que además permiten que los trabajadores y los ciudadanos tengan algo que decir en la toma de decisiones.
En 46 países, es decir nueve países más que el año pasado, se reprimieron manifestaciones y los trabajadores y trabajadoras sufrieron represalias por expresar sus opiniones.
Ciertas categorías de trabajadores quedan excluidos del derecho a la libertad sindical en el 58% de los países, y los trabajadores/as no pueden ejercer el derecho de huelga en el 68% de ellos. Se deniega a los trabajadores el derecho a negociar colectivamente para conseguir mejores condiciones de trabajo en el 57% de los países.
Estos resultados se desprenden del Índice Global de los Derechos de la CSI. A lo largo de 2015 y en 2016, la CSI ha venido investigando y documentando casos de represión y abusos sufridos por los trabajadores y trabajadoras que se alzaron reclamando derechos y libertades democráticas, igualdad y justicia social. En base a las pruebas recogidas, se ha elaborado el tercer Índice Global de los Derechos, donde se clasifican 140 países en función del grado de respeto hacia los derechos de los trabajadores.
El Índice Global de los Derechos cubre las normas fundamentales del trabajo internacionalmente reconocidas, concretamente derechos civiles, el derecho a la negociación colectiva, el derecho de huelga, el derecho de sindicalización y derechos procesales.
Estos derechos están protegidos por instrumentos internacionales sobre derechos humanos, incluyendo la Declaración Universal de los Derechos Humanos, y han sido reconocido como requisitos esenciales para la realización del trabajo decente.
La posibilidad de organizarse permite a los trabajadores utilizar su poder colectivo para lograr mejores derechos laborales en general, mejorando entre otras cosas la salud y seguridad en el lugar de trabajo, el derecho a no ser discriminados y la garantía de que no se recurra al trabajo infantil o al trabajo forzoso. El Índice Global de los Derechos se centra por tanto en los derechos laborales colectivos, como punto de referencia para la consecución del trabajo decente.
Para ver el informe completo en español:
http://www.ituc-csi.org/IMG/pdf/survey_ra_2016_sp.pdf