Scarlett Johansson, ChatGPT y los derechos digitales

Por Gabriela Frías Villegas[1]

En la película de ciencia ficción HER (2013), dirigida por Spike Lee, un hombre solitario, llamado Theodore Twombly, se enamora de Samantha, una inteligencia artificial programada para funcionar como asistente virtual y acompañante. La actriz norteamericana Scarlett Johansson dotó de voz a Samantha, quien se comporta como una mujer sumisa, amable y siempre lista para atender los deseos de Twombly.

En el momento de su estreno, hace casi diez años, la película generó una gran cantidad de debates, que plantearon preguntas como las siguientes: ¿podrá una máquina mantener una conversación compleja con un ser humano?, ¿qué pasará cuando las inteligencias artificiales sean parte de la vida de todas las personas?, ¿podrá una máquina despertar sentimientos en un ser humano?, ¿qué consecuencia puede acarrear el uso de las inteligencias artificiales?

Estas y otras interrogantes han dejado atrás a la ficción para convertirse en problemas que estamos discutiendo actualmente, como muestra el episodio que protagonizó en la vida real la actriz Scarlett Johansson. Como ella comentó en sus redes sociales, en septiembre de 2023 recibió una oferta de Sam Altman, uno de los fundadores de Open IA, la compañía que creó y que maneja la inteligencia artificial ChatGPT. Dicha oferta consistía en que Open IA contrataría a Johansson para dale voz a la nueva versión de la inteligencia artificial, llamada ChatGPT 4.0. Es decir, la compañía deseaba crear una inteligencia artificial similar a la de la película HER. Después de mucho pensarlo, la actriz rechazó la oferta y pensó que la historia terminaba ahí. No obstante, la historia continuó cuando el 13 de mayo de 2024, cuando Mark Chen y Barret Zoph, dos de los desarrolladores de Open IA presentaron la versión de voz de ChatGPT 4.0. a través de YouTube. Los usuarios de la plataforma se sorprendieron al escuchar la voz, llamada Sky, que era muy similar a la de Scarlett Johansson. Como resultado, la actriz contrató a un equipo legal que preparó una demanda legal contra la compañía, que “aceptó de mala gana retirar la voz de Sky” (Scarlett Johansson, en una batalla legal por el uso de su imagen sin su permiso – LA NACION). 

Es interesante observar que esta no es la primera vez que Scarlett Johansson emprende acciones legales contra una compañía desarrolladora de inteligencias artificiales. En 2023, demandó a la compañía Convet Software, que usó su nombre y su imagen sin permiso, para un anuncio que se publicó en la red social X. Aunque el caso de Johannson ha sido muy publicitado, la imagen o la voz de cualquier persona podría usarse sin su permiso de maneras inadecuadas. Por ello, sería importante legislar los derechos digitales de las personas.

¿Qué son los derechos digitales?

De acuerdo a la Introducción a los derechos digitales, publicada por Media Defence, los derechos digitales corresponden a los mismos derechos humanos pero en el ámbito digital. El término “derechos digitales” se refiere a cuestiones relativas a cómo se ejercen y protegen los mismos derechos que siempre han sido fundamentales para todos los seres humanos, como la libertad de expresión, la privacidad y el acceso a la información, en la era de Internet, las redes sociales y la tecnología (Media Defence). Aunque en México y en muchos países del mundo estos derechos aún no han sido legislados, ya se están discutiendo en distintos foros y documentos. Entre ellos, es interesante revisar la Carta de los derechos digitales, publicada por el gobierno de España, en la que se señala como uno de los derechos fundamentales el de la propia identidad en el entorno digital:

1. El derecho a la propia identidad es exigible en el entorno digital. Esta identidad vendrá determinada por el nombre y por los demás elementos que la configuran de acuerdo con el ordenamiento jurídico nacional, europeo e internacional. 2. Debe garantizarse, con arreglo a nuestro ordenamiento jurídico, el derecho a la gestión de la propia identidad, sus atributos y acreditaciones. Consecuentemente, la identidad no podrá ser controlada, manipulada o suplantada por terceros contra la voluntad de la persona. 3. Se establecerán las garantías necesarias que permitan la verificación segura de la identidad en el entorno digital con la finalidad de evitar manipulaciones, suplantaciones, o control de la misma por parte de terceros(140721-Carta_Derechos_Digitales_RedEs.pdf). 


De acuerdo con los lineamientos anteriores, la actriz Scarlett Johansson sufrió una violación a sus derechos digitales debido a las acciones de la compañía Open IA. Este caso le dio la vuelta al mundo y acaparó la atención de los medios debido a que la protagonista es una famosa actriz. No obstante, las personas comunes que no despertamos un gran interés mediático podríamos pensar que sería poco probable que nuestra identidad digital fuera usada sin nuestro permiso. Esto, lamentablemente, está lejos de ser cierto, pues recientemente han crecido los hackeos a las redes sociales, en los que algún malhechor se hace pasar por alguien más con el objetivo de extorsionarlo o de solicitarle dinero a sus conocidos. Sin duda alguna, estos fraudes no cesarán y probablemente se volverán más sofisticados. Por ello, todas y todos debemos estar enterados de nuestros derechos digitales y exigir su observación y su adecuada legislación.

140721-Carta_Derechos_Digitales_RedEs.pdf. (s. f.). Recuperado 12 de junio de 2024, de https://www.lamoncloa.gob.es/presidente/actividades/Documents/2021/140721-Carta_Derechos_Digitales_RedEs.pdf

Media Defence. (s. f.). Introducción a los derechos digitales. https://archivos.juridicas.unam.mx/www/bjv/libros/15/7214/1.pdf

Scarlett Johansson, en una batalla legal por el uso de su imagen sin su permiso—LA NACION. (s. f.). Recuperado 4 de junio de 2024, de https://www.lanacion.com.ar/espectaculos/personajes/scarlett-johansson-en-una-batalla-legal-por-el-uso-de-su-imagen-sin-su-permiso-nid02112023/


[1] Investigadora del Programa Universitario de Derechos Humanos.