Conmemoraciones Internacionales

Por Mario Alberto Naranjo Ricoy

Cada día es un momento propicio para reflexionar sobre algún aspecto de los derechos humanos, su historia, sus principios, sus condiciones necesarias y sus retos actuales. Así como el pasado mes de septiembre estuvo marcado por importantes fechas y actos asociados a algunos tópicos esenciales en esta materia, el mes de octubre trae consigo nuevas efemérides mundiales de igual trascendencia.

La celebración del Día Internacional de las Personas de Edad, el 1° de octubre, así como del Día Internacional de la Niña, el 11 de octubre, son dos efemérides que nos permiten revisar la situación de estos dos grupos de población, con el fin de reconocer las dificultades específicas que enfrentan en nuestras sociedades para el goce pleno de sus derechos y libertades. De manera tangencial, ambos días remiten a la universalidad de los derechos humanos, pues el propósito es que éstos sean vigentes para todas las personas y grupos sociales, y en particular para aquellos que se encuentran en condición de vulnerabilidad.

A su vez, la celebración del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, el 17 de octubre, nos recuerda que los derechos humanos, para su ejercicio pleno, requieren de una serie de condiciones necesarias e indispensables, como garantizar a todos el acceso a los recursos más elementales. Finalmente, el Día de las Naciones Unidas, el 24 de  octubre, también nos permite resaltar, una vez más, la importancia de la comunidad internacional y de la cooperación entre países, a través de los diversos organismos multilaterales de los que se han dotado, para difundir y preservar los derechos humanos.

01 de octubre. Día Internacional de las Personas de Edad

Desde hace décadas, la comunidad internacional ha reconocido la necesidad de promover, respetar y proteger los derechos humanos de las personas de edad, dejando constancia de su compromiso al respecto a través de diversas declaraciones e instrumentos jurídicos, entre los que destacan los Principios de las Naciones Unidas para las Personas Mayores adoptados por la Asamblea General en 1991, así como el Plan de Acción Internacional de Madrid sobre el Envejecimiento de 2002.  A nivel regional o continental, se cuenta con la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Adultas Mayores, aprobada en 2015 por la Organización de Estados Americanos (OEA) y considerada el instrumento jurídico más completo y holístico en la materia.

Entre los principios que recoge el primero de los documentos arriba mencionados, y que constituyen directrices que estructuran los derechos de las personas de edad, se encuentran: la independencia, principio que implica tener acceso a alimentación, agua, vivienda, vestido, atención a la salud, educación y capacitación, tener oportunidades de contar con un  trabajo remunerado u otras fuentes legales de ingresos, participar en la determinación de las condiciones de su retiro laboral, así como su derecho a vivir en su propio domicilio el mayor tiempo posible; la participación, principio que se logra mediante su permanente integración a la sociedad, su interacción con las generaciones más jóvenes y su intervención activa en la formulación de políticas y en la toma de decisiones públicas que incidan directamente en su bienestar; los cuidados, principio que involucra ser protegido por su familia y comunidad, acceder a servicios de salud que les permitan mantener un nivel óptimo de bienestar físico, mental y emocional, así como acceder a servicios jurídicos y de atención institucional que les brinden protección y autonomía; la autorrealización, principio que contempla el derecho de tener oportunidades de desarrollo pleno y de acceder a los recursos educativos, culturales, espirituales y recreativos de su sociedad; y, finalmente, la dignidad, principio que considera el derecho de las personas de edad a ser respetadas y de vivir en condiciones que les proporcionen seguridad y las mantengan libres de cualquier tipo de discriminación, explotación y maltrato  físico o mental.[1]

En 2019 se estimó que había 703 millones de personas de 65 años o más a nivel mundial. Para 2050, se calcula que esta cifra llegará a 1,500 millones,[2] aumentando también la proporción de este grupo en la estructura etaria de la población. Este fenómeno de envejecimiento demográfico afectará a todas las regiones del planeta y debería ser una razón más para que los Estados y gobiernos implementen con celeridad un conjunto de planes, programas, políticas públicas y diseños institucionales orientados a garantizar a las personas de edad sus derechos y libertades fundamentales.

Para este 2021, la ONU ha propuesto el tema “Equidad digital para todas las edades” para este día internacional, tomando en cuenta la conversión e innovación digital que caracteriza a la llamada Cuarta Revolución Industrial, rasgo que se acentuó a raíz de las medidas de confinamiento impuestas para contener la pandemia de COVID-19. Con ello, el máximo organismo internacional ha hecho énfasis en que las personas de edad accedan y participen significativamente en el mundo digital mediante el uso generalizado de internet y de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC’s), recibiendo la educación y capacitación adecuada, así como la información que los mantenga alerta de los riesgos que dicho uso conlleva, como son delitos cibernéticos, robo de datos personales y flujo de corrientes de desinformación.

11 de octubre. Día Internacional de la Niña

En 1995, los países asistentes a la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer adoptaron la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing, ciudad en la que se desarrolló dicho evento. Estos documentos tuvieron un carácter vanguardista en la promoción de los derechos de las mujeres y fueron los primeros en los que se atendió específicamente los derechos de las niñas. A partir de entonces, la comunidad internacional ha avanzado en el reconocimiento de estos derechos, así como de los desafíos particulares que enfrentan niñas y adolescentes.

Respecto de esto último, se estima que, en el mundo, cerca del 25% de las adolescentes entre 15 y 19 años carece de empleo y educación, en comparación con el 10% de adolescentes varones de la misma edad. Asimismo, se calcula que en 2021 hay alrededor de 435 millones de niñas y mujeres que viven en condiciones de pobreza, con menos de $ 1,90 dólares al día. Por otra parte, se sabe que una de cada tres mujeres ha sufrido violencia física o sexual, situación que se ha agravado pues la pandemia de COVID-19 ha incidido en el aumento de la violencia doméstica contra ellas.[3]

Que las niñas, adolescentes y mujeres accedan a una vida segura y libre de violencia, en circunstancias que les permitan ejercer su derecho a la educación, el trabajo, la alimentación, la salud, a ser titular de un patrimonio, entre otras muchas prerrogativas, es una condición indispensable para lograr la igualdad de género y construir un orden social más justo. En ese sentido, es preciso proporcionar a las niñas y adolescentes herramientas que las empoderen y les permitan desarrollar todo su potencial para dirigir y transformar el mundo en beneficio de ellas y de todos.

17 de octubre. Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza

La pobreza es una de las condiciones que más vulnera los derechos humanos y obstaculiza el libre desarrollo de las personas. Por ello, el combate en contra de este flagelo debe ser una lucha sin cuartel y a través de todos los medios que permitan atender sus causas estructurales, así como sus múltiples factores y dimensiones, pues la pobreza no es sólo una cuestión de ingreso sino que implica la falta de acceso a vivienda, servicios básicos, a una adecuada alimentación, a un ambiente sano, así como a servicios educativos y de cultura, entre otros aspectos.

En 2015, se estimó que 736 personas vivían con menos de $1,90 dólares al día. En 2018, el 8% de los trabajadores del mundo vivían con sus familias percibiendo menos de $1,90 dólares diarios por persona, en tanto que el 55% de la población mundial no tenía acceso a ningún programa de ayuda social con dinero en efectivo. Tomando en consideración estos y otros datos, la ONU propuso poner fin a la pobreza en 2030 como parte de sus Objetivos de Desarrollo Sostenible. Sin embargo, la pandemia de COVID-19 ha tenido tal nivel de efectos económicos adversos que se piensa que el número de personas en situación de pobreza podría aumentar por primera vez desde 1990, entre 420 y 580 millones, dificultando seriamente su erradicación. La comunidad internacional, gobiernos y Estados, deben tomar medidas eficaces que ayuden a contener este posible retroceso.

24 de octubre. Día de las Naciones Unidas

El pasado 14 de septiembre de 2021 inició el 76° Período de Sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas. En su intervención ante dicho organismo, el Secretario General de la ONU, Antonio Guterres declaró:

Estoy aquí para hacer sonar la alarma (…) Nuestro mundo nunca ha estado más amenazado. O más dividido. Nos enfrentamos a la mayor cascada de crisis de nuestra vida. La pandemia del COVID-19 ha sobredimensionado las flagrantes desigualdades. La crisis climática está golpeando el planeta. La agitación desde Afganistán hasta Etiopía, pasando por Yemen y más allá ha frustrado la paz. Un aumento de la desconfianza y la desinformación está polarizando a la gente y paralizando las sociedades. Los derechos humanos están bajo fuego. La ciencia está siendo atacada. Y los salvavidas económicos para los más vulnerables llegan demasiado poco y demasiado tarde… si es que llegan. La solidaridad está ausente, justo cuando más la necesitamos”.[4] Así, el actual titular del máximo organismo internacional resumió en parte los objetivos que ha perseguido desde su fundación en 1945: acabar con la guerra y los conflictos bélicos, promover la dignidad humana y proteger los derechos humanos, reducir la desigualdad, erradicar la pobreza, la ignorancia, las enfermedades y el hambre, entre otros. A la luz de los desafíos actuales que enfrentamos y que reclaman una respuesta coordinada, es preciso que se refuercen las funciones y atribuciones de la ONU, pues ninguna otra instancia internacional cuenta con su legitimidad, poder de convocatoria e impacto normativo.


[1] Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU, “Los Principios de las Naciones Unidas en favor de las personas de edad”, disponible en: https://www.un.org/development/desa/ageing/resources/international-year-of-older-persons-1999/principles/los-principios-de-las-naciones-unidas-en-favor-de-las-personas-de-edad.html (última consulta: 30 de septiembre de 2021).

[2] “Día Internacional de las Personas de Edad. 1 de octubre”, disponible en: https://www.un.org/es/observances/older-persons-day (última consulta: 30 de septiembre de 2021).

[3] “Día Internacional de la niña, 11 de octubre”, disponible en: https://www.un.org/es/observances/girl-child-day (última consulta: 29 de septiembre de 2021).

[4] “Una catarata de crisis pone al mundo al borde del abismo, solo a través del multilateralismo podemos salvarnos, afirma Guterres”, disponible en: https://news.un.org/es/story/2021/09/1497032 (última consulta: 29 de septiembre de 2021).