Heroísmos

Francisco Tenamaztle: un pionero en la defensa de los derechos indígenas

Hace 500 años, la toma de México-Tenochtitlan por parte del ejército encabezado por Hernán Cortés representó el comienzo de un proceso de conquista y colonización que marcó la historia del mundo y de este país. A partir de entonces, a lo largo y ancho del Nuevo Continente se desataron guerras de dominación para instaurar un orden social que, basado en el racismo y la discriminación, afectó a la población indígena y a los afrodescendientes traídos a estas tierras en calidad de esclavos, poniendo en tela de juicio, cuando no conculcando cruelmente, sus derechos y libertades fundamentales.

En esos tiempos, conviene recordar, la época moderna se hallaba en sus albores y la doctrina de los derechos humanos no estaba vigente. De hecho, habrían de pasar más de 350 años para que la Revolución Francesa proclamara la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano en 1789. Sin embargo, aún cuando fuera de forma incipiente, a través del discurso de algunas figuras destacadas comenzaron a aflorar las primeras nociones de respeto y defensa de la dignidad de la persona como principio universal.

Una de esas figuras fue la de Francisco Tenamaztle, guerrero indígena perteneciente a la elite gobernante de los caxcanes y férreo defensor de los derechos de su etnia. Tenamaztle era hijo del señor de Nochistlán, cabecera municipal que había sido incorporada a la encomienda otorgada al capitán español Miguel de Ibarra. Los abusos de éste y otros encomenderos provocaron la rebelión generalizada de varios pueblos originarios del territorio entonces conocido como Nueva Galicia (correspondiente a los actuales estados de Nayarit, Jalisco y Zacatecas), dando inicio a la denominada Guerra del Mixtón (1541-1542). De inmediato, Tenamaztle se puso a la cabeza de las fuerzas indígenas que enfrentaron a los ejércitos de españoles y aliados.

Al inicio del conflicto, los indígenas rebeldes obtuvieron algunas victorias militares e incluso pusieron bajo sitio la ciudad de Guadalajara. Posteriormente, la llegada a la región del Virrey Antonio de Mendoza, al mando de un ejército de aliados numeroso, inclinó el fiel de la balanza a favor de los españoles. Tenamaztle decidió rendirse y fue tomado preso pero pronto liberado por sus seguidores en el cerro del Mixtón. Enseguida, comenzó una lucha de resistencia que duró nueve años. En 1551, tras una ardua guerra de guerrillas, el líder de los caxcanes se rindió y al siguiente año fue enviado a España para ser juzgado por el Consejo de Indias.

Ya en la península ibérica, Tenamaztle entró en contacto con Fray Bartolomé de las Casas y quedó influido por el pensamiento humanista del dominico, quien le ayudó a preparar su defensa. En el documento que presentó ante el Consejo de Indias y ante el Rey Carlos I, Tenamaztle denunció las injusticias y malos tratos cometidos en contra suya, de su pueblo y de sus principales, las cuales incluyeron el ahorcamiento de nueve caciques y de innumerables vasallos, así como la esclavización de los presos y el despojo de sus propiedades. Además, reivindicó su derecho natural a la rebelión ante la opresión que los españoles disfrazaban de guerra justa y santa.

En la actualidad, la intriga persiste pues se desconoce el desenlace de esta trama. Los historiadores aún se hallan a la espera de nuevos hallazgos documentales que arrojen luz sobre el veredicto con el que el Consejo de Indias concluyó el caso. Sin embargo, los testimonios recuperados han sido suficientes para que un especialista como Miguel León Portilla considere a Francisco Tenamaztle no sólo como un heroico guerrero caxcan, sino también como un precursor de los derechos humanos, defendiéndose y defendiendo a su pueblo ante los tribunales imperiales.

Escrito con información de:
https://es.wikipedia.org/wiki/Francisco_Tenamaztle
(26/07/08)