“Cuando la obligatoriedad del hiyab afecta a todas las mujeres, entonces todas ellas deben levantar la voz”, dijo la líder de la campaña
A medida que más y más turistas occidentales visitan Irán, se insta a las mujeres extranjeras a romper el estricto código de vestimenta islámico del país, a “tomar posición” sobre las leyes restrictivas.
Es ilegal que las mujeres salgan a lugares públicos sin usar el velo en el país, donde miles de agentes encubiertos y la “policía de la moralidad” patrullan las calles para vigilar si se cometen infracciones.
Las mujeres con el cabello o cuerpo inadecuadamente cubiertos pueden ser amonestadas públicamente, multadas e incluso arrestadas. Sigue leyendo